*Nota: Muchos podrían pensar que las chalotas simplemente son un tipo de cebolla pequeña y alargada, pero lo cierto es que aunque pertenecen a la misma familia y su apariencia es muy similar, son dos bulbos diferentes. Tienen parte de ese sabor característico, con notas dulces, ácidas y picantes, todo al mismo tiempo. Sin embargo, son más suaves que las cebollas y evocan un poco el sabor del ajo.
La parte comestible de la chalota es su base en forma de bulbo, el cual crece parcialmente debajo de la tierra como si se tratara de un tubérculo. Se pueden comer crudas o cocidas; son muy versátiles y fáciles de incorporar en numerosas recetas. Gozan de gran popularidad en la cocina india, asiática, francesa y mediterránea, donde no solo aportan sabor y aroma en la cocina, sino que también son tomadas en cuenta por sus propiedades nutricionales y valor medicinal.